Globos de Oro: la gran fiesta de 'Argo' y 'Los Miserables'

La 70 edición de los Globos de Oro tiene dos producciones como claras triunfadoras, el musical 'Los Miserables' y el thriller 'Argo', la cinta dirigida por Ben Affleck que recibió el galardón a Mejor director pocos días después de que estallase la polémica por no haber entrado en las nominaciones para esta categoría en los premios Oscar.

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Pero en una gala como la de ayer tampoco podía faltar un gran perdedor. Fue sin duda el 'Lincoln' de Spielberg, que pese al reconocimiento de su actor principal, Daniel Day-Lewis, por su interpretación del legendario presidente, en lo demás se fue con las manos vacías pese a que aspiraba a un gran número de premios.

Todo lo contrario para 'Los Miserables', la adaptación cinematográfica del musical basado en la obra de Víctor Hugo que consiguió tres de los cuatro Globos a los que estaba nominada, en especial el de Mejor película de comedia o musical del año.

Buena culpa del éxito la tienen dos de sus principales intérpretes, Hugh Jackman que se proclamó mejor actor en esta categoría por llevar el peso de la cinta en uno de sus mejores trabajos hasta la fecha, y Anne Hathaway, cuyo desgarrador número musical se ha quedado grabado en las retinas de muchos espectadores y por el que aspirará en las próximas semanas a muchos más galardones.

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En cuanto a Mejor película dramática, 'Argo' dio la campanada pese a que los pronósticos la situaban entre las perdedoras. Un premio muy meritorio, y más teniendo en cuenta que Ben Affleck hizo lo propio arrebatando el Globo a realizadores de la talla de Steven Spielberg ('Lincoln') y Kathryn Bigelow ('La noche más oscura').

Tarantino también tiene motivos para estar contento, pues el guión de su nueva película 'Django desencadenado' ha sido muy bien considerado al igual que el personaje interpretado por Christoph Waltz, un carismático cazarrecompensas que al igual que ocurrió con su personaje en 'Malditos bastardos' ha enamorado a los espectadores. Dos Globos de Oro que, tal y como afirmó Tarantino, son "una sorpresa".

Otras de las producciones que más están despuntando de cara a la carrera por el Oscar también fueron galardonadas en esta edición. Jessica Chastain ('La noche más oscura') y Jennifer Lawrence ('El lado bueno de las cosas') se alzaron con los respectivos Globos de Mejor actriz de drama y Mejor actriz de comedia o musical, mientras que 'La vida de Pi', de Ang Lee, obtuvo el de Mejor banda sonora.

La británica Adela subió al escenario ilusionada para recoger el premio por su tema 'Skyfall' para la película del mismo título. No ha tenido demasiada suerte la última entrega de la franquicia Bond, que fuera de Reino Unido no ha tenido la repercusión esperada en los principales premios del cine.

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'Brave' salió victoriosa en una de las categorías con una mayor competencia, la de Mejor película de animación, arrebatándole el Globo a '¡Rompe Ralph', y Michael Haneke volvió a celebrar la gran acogida de 'Amor' como Mejor película extranjera.

La gala estuvo orquestada por Tina Fey y Amy Poehler, dos reinas de la comedia en Estados Unidos que, pese a estar más comedidas que Ricky Gervais en anteriores ocasiones, supieron soltar algún comentario un tanto ácido para arrancar alguna carcajada a los presentes.

Por supuesto hubo sorpresas, como la repentina aparición del expresidente Bill Clinton para presentar el filme 'Lincoln' y el emotivo discurso de Jodie Foster, una "salida del armario" oficial y en toda regla con mucho estilo, con el que agradeció el premio honorífico Cecil B. Demille a su trayectoria en el cine.

Para el recuerdo quedará también el cara a cara de Sylvester Stallone y Arnold Schwarenegger, discutiendo sobre quién de los dos tenía peor nivel de inglés. Los que fueran competidores directos en las grandes producciones de acción de los 90, ahora son grandes amigos.

En definitiva, una gala de lo más entretenida no tan previsible como se esperaba y con algunos momentos para recordar.