Los sets más mortales del cine

El conquistador de Mongolia (1956): La película catalogada como uno de los fracasos de los años 50 no solo se la recuerda por su mal recibimiento de crítica y taquilla. Como se rodó cerca de un centro militar del Gobierno de EEUU donde ensayaban con armas nucleares,el director Dick Powell, sus protagonistas John Wayne y Susan Hayward, y gran parte del equipo contrajeron cáncer por la exposición radioactiva. Un total de 91 personas, de los 220 que participaron en el rodaje, enfermaron de algún tipo de tumor durante los años siguientes mientras que 46 de ellas fallecieron en los 25 años posteriores a la producción.

Delta Force 2 (1990): Chuck Norris es todo un especialista en escenas de alto riesgo y siempre se ha rodeado de los mejores en el terreno. Pero lo sucedido en esta película demuestra que a veces los accidentes ocurren hasta a los más preparados. Durante el rodaje de una escena en Filipinas, un helicóptero se estrelló debido a un problema en el motor, provocando la muerte de cinco personas.

Los límites de la realidad (1983), la película co-dirigida por Joe Dante, John Landis, George Miller y Steven Spielberg , era la extraña adaptación de la famosa serie de televisión. Pero el terror de su argumento se hizo realidad en pleno rodaje. Durante la grabación del segmento dirigido por Landis, el actor Vic Morrow y los niños actores Myca Dinh (7 años) y Renee Shin-Yi (6 años) fallecieron de manera brutal por un error de cálculo. En la escena, un helicóptero volaba a poca distancia del terreno mientras los tres actores debían escapar de un tiroteo. El técnico de pirotecnia no sabía que el piloto estaba teniendo problemas para pilotear el helicóptero entre los explosivos, y detonó dos cargas que estaban muy cercanas al aparato. Esto provocó que el piloto perdiera el control del vehículo y aplastara a los tres actores. Las muertes provocaron una importante batalla legal en la industria, y aunque nadie fue condenado por el accidente, se consiguieron cambiar las regulaciones por el trabajo de los niños en el cine durante la noche y en escenas que incluyen efectos especiales.

El arca de Noé (1928): La película dirigida por Michael Curtiz fue una de las primeras producciones de lo que hoy conocemos como género catástrofe. Durante la filmación de la inundación final, la cantidad de agua utilizada cogió a los actores por sorpresa provocando la muerte de tres extras por ahogamiento e hiriendo seriamente a otro al que tuvieron que amputarle una pierna. Debido al desastre provocado por la mala preparación del equipo técnico, al año siguiente la industria dio a conocer unas regulaciones oficiales de seguridad para las escenas arriesgadas.

El vuelo del Fénix (1965) , dirigida por Robert Aldrich fue una producción de bajo presupuesto pero tuvo un tremendo éxito de taquilla y dos nominaciones a los Oscar. Durante la filmación de una escena, el piloto de pruebas Paul Mantz falleció cuando intentaba aterrizar el Fénix original. El avión se partió en la mitad, estrellando al tocar tierra y lastimando seriamente a un extra. Para terminar la escena se utilizó un avión sustituto, un North American O-47A.

Los Mercenarios 2 (2012), la secuela del gran éxito de Sylvester Stallone promete ser más espectacular y con más testosterona que su predecesora. En el rodaje de la primera parte, se produjo una explosión en un bote de goma y uno de los especialistas de riesgo falleció en el acto y otro quedó en estado crítico durante unos días.

El cuervo (1994): Esta película de culto iba a ser el gran salto al estrellato para Brandon, el hijo de Bruce Lee. Pero a los 28 años, el actor fue víctima de un fatal error humano. El accidente ocurrió durante una escena donde su enemigo Funboy (Michael Masse) le dispara como estaba previsto en el guión, pero el arma guardaba una bala antigua que no había sido detectada por el equipo técnico provocando la muerte de Brandon 12 horas más tarde en el hospital.

xXx (2002): A Tom Cruise le gusta rodar sus propias escenas de riesgo, pero otros actores son más conscientes y dejan el trabajo en manos de profesionales, como es el caso de Vin Diesel. En una escena de esta película de acción, el personaje principal Xander Cage, tenía que deslizarse y caer sobre un submarino. El especialista de riesgo, Harry L. O'Connor, tomó el relevo pero al estar en plena caída calculó mal los tiempos chocando contra un puente a toda velocidad falleciendo al instante. El director Rob Cohen mantuvo una versión editada de la caída en el montaje final en honor al trabajo de O'Connor.